Animados por el equipo local de guías de marcha del colegio (Lorena, Nelson, Giovanna y los Hnos. Fernando Pino y Álvaro Sepúlveda), más dos guías invitados por el equipo central (Karla Sánchez y el Hno. Fernando Figueroa), los guías Fabiola Cortés, David Santander y Pamela Magnata (ausente durante el lanzamiento por enfermedad) y los 22 jóvenes del colegio vivieron una experiencia de encuentro con el movimiento, con ellos mismos y con Jesús. La celebración de la luz fue un momento importante dentro de la vivencia de las distintas actividades durante el lanzamiento. La cercanía de Jesús que pasa sanando y perdonando fue algo muy significativo para cada uno de los peregrinos. Al igual, que las reuniones vividas que los invitaban a entrar en un conocimiento profundo de sí mismos para ser PERSONAS, capaces de crecer, amar y transformarse.Hay que destacar, que durante el lanzamiento, la cordada Ayanai (Sendero) estuvo ayudando y prestando un servicio muy delicado para la futura cordada. Para ellos, un agradecimiento especial. La celebración del lanzamiento estuvo marcada por dos hechos importantes. El primero, la celebración de dos promesas de peregrino de la cordada Teofanía (Cumbre) y el compromiso de los jóvenes que vivían el lanzamiento a vivir la aventura de Marcha, en su cordada, en su familia y en el colegio. Acompañados por la comunidad de Hermanos, el Consejo Directivo del Colegio y espacialmente por un grupo de papás, mamás y amigos de los nuevos peregrinos, se pudo conocer el nombre de la nueva cordada… ELCHEN que significa “en nombre de Dios, creador de los hombres” en mapudugún. De esta forma, se completa el movimiento en el Colegio Nuestra Señora de Andacollo: Teofanía (Cumbre); Ayanai (Sendero) y Elchen (Llano). Felicidades a cada una de las cordadas, especialmente para Elchen. Que Jesús y María los vayan transformando en aquella idea que Dios, desde siempre, ha tenido para cada uno de ellos. OASIS

El sábado, en forma paralela al lanzamiento, la cordada Teofanía (Cumbre) vivía la experiencia de de la acampada OASIS. Tiempo para recuperar las fuerzas, para re-evaluar el camino andado en los años anteriores; para comprometerse nuevamente con los peregrinos de la cordada que han perseverado en el movimiento; y tiempo para ver los caminos de Dios en la historia personal y en la historia de la cordada. Ocho fueron los peregrinos que se comprometieron a vivir la Cumbre como experiencia de encuentro  con Dios y de encuentro con los que los rodean por medio del servicio desinteresado y de la proyección de la vida en las distintas especialidades que, como alumnos de colegio técnico – profesional, han optado a lo largo del año pasado. Dos peregrinos hicieron su promesa de peregrinos en el marco del lanzamiento de la cordada Elchen. A ellos, y al resto de la cordada Teofanía, la invitación a seguir caminando juntos, descubriendo a Jesús, como el Guía de nuestras vidas.
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