A esta jornada asistieron la mayoría de los animadores de los colegios maristas de Chile y fue muy productiva en términos de las actividades que se planificaron para que los preadolescentes tuvieran un día lleno de alegría y entusiasmo, teniendo presente a los Hermanos de Zaire y su gesto de amor pleno a Dios. Para comenzar en la mañana después de los saludos y abrazos del reencuentro, hicimos una oración para poner en manos del Señor la jornada y el encuentro que se aproxima y para dar pie al trabajo de cada una de las etapas. Finalizamos el día con un rico almuerzo. Fue una jornada llena de alegría y amor al trabajo que se realiza con los preadolescentes.

Gracias al Instituto Alonso de Ercilla que nos acogió tan cordialmente.

Y nos vemos en Villa Alemana…
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