Con la presencia del arzobispo de La Serena y presidente de la Conferencia Episcopal, Mons. René Rebolledo, y del Hno. Oscar Martín, consejero general, los hermanos tuvieron la oportunidad de agradecer a la comunidad educativa y parroquial por todo el cariño recibido en este lugar desde su llegada en marzo de 1997.

Como se informaba en el último informe del Consejo Provincial, luego de un largo proceso de reflexión y discernimiento y ante la dificultad de mantener abiertas todas las comunidades de la Provincia por la reducción del número de Hermanos, se tomó la dolorosa decisión de cerrar esta casa que ha sido tan significativa para la Congregación.

Esta eucaristía fue una buena ocasión para recordar y agradecer por la vida entregada en este lugar desde la llegada a la población de los hermanos Mariano Varona, Fernando Pino y Luis Sanz. A pesar de la tristeza que significa este momento, queda la certeza de que se ha sembrado la semilla del carisma marista y que este “desierto floreció de amor”. La Red Marista de Chile mantendrá activa la animación del establecimiento, apoyando los procesos educativos y evangelizadores como siempre lo ha hecho. Especialmente ahora, con la llegada de su nuevo rector, el Sr. Vicente Amurrio.