Esta iniciativa fue organizada por un grupo de ocho exalumnos con el apoyo del Equipo de Laicado del Ámbito sectorial de Vida Marista y convocó a 22 jóvenes entre 19 y 30 años de edad.

Sus objetivos fueron:
1. Generar un primer espacio de encuentro de jóvenes, de 19 a 30 años, que están vinculados a lo marista a través de experiencias de servicio y comunitarias.
2. Celebrar la vida y el camino recorrido, tomando conciencia de la historia personal y de la etapa vital en que se encuentra cada uno.
3. Proponer entre todos los asistentes, en base a un primer borrador, diversas ideas de participación y organización sostenible para el presente y futuro de los jóvenes Maristas en Chile.

La dinámica de estos días fue de reflexiones personales, actividades lúdicas y diálogo comunitario con un conjunto de experiencias que giraron en torno a tres ejes: mirar mi pasado; observar mi presente y proyectar mi futuro con otros. Además, se presentó una propuesta de itinerario (diseñada por los ocho jóvenes), la que fue analizada y mejorada en la jornada, y que abarca una serie de sugerencias de desarrollo en lo humano – espiritual, lo fraterno - comunitario y la misión – servicio en un marco de respeto por los valores maristas y de los procesos personales de cada participante.

Al conocer sobre esta experiencia, el Hno. Patricio Pino se inspiró para crear este sencillo y hermoso poema:

Promesa de futuro es,
para este carisma de fe,
pues en jóvenes se encarnó
cuando en La Valla nació.
¿Qué depara esta experiencia
que a ellos convocó?
¿Será simiente escondida
de una nueva vida
que el Espíritu sembró?
Esperamos expectantes,
acompañamos constantes
y oramos, perseverantes,
por estos jóvenes buscadores
que se han hecho caminantes.

Este proceso ha motivado a este equipo de ocho jóvenes a continuar su trabajo este 2024 con la clara intención de sumar a más personas para desarrollar un camino junto a otros jóvenes que comparten el ideal de Champagnat, de generar comunidades al servicio de los más necesitados y marginados.